Vivir fuera de tu país de origen es una aventura enriquecedora, sinónimo de apertura al mundo y el descubrir de cosas nuevas, pero al mismo tiempo llena de retos relacionados con el desarraigo y la distancia. Los retos de la expatriación son numerosos: el anuncio de la partida, la llegada a un nuevo país, a veces a otro continente, una nueva cultura, pero algo que sin duda es fundamental para sobrepasar y facilitar ese proceso, es conocer el país al que llegas, tu casa adoptiva. Por eso hoy quiero hablar un poco del país que hoy me recibe, Bélgica.
La Bélgica políglota
Bélgica es uno de los seis países fundadores de la Comunidad Europea y sede de las principales instituciones europeas. La cultura belga está influenciada por las diferentes identidades culturales de las tres regiones del país. En Bélgica se hablan tres lenguas oficiales, el francés y el alemán en la región valona y el neerlandés en la región flamenca, pero hoy nos enfocaremos un poco en los belgas francófonos quienes tienen expresiones propias que no siempre son fáciles de entender incluso para un francés.
Si ya estás tomando clases de francés o lo aprendiste en otro país, es importante que tengas en cuenta algunas adaptaciones que los belgas hacen del lenguaje, como muchos lo hacemos en nuestra lengua materna. Estas son algunas expresiones que debes conocer:
- A tantôt, que originalmente es, A tout à l’heure = Hasta pronto
- Je te sonne, que un francés diría, Je te téléphone = Te llamo
- Il drache, es la forma belga para decir, Il pleut = Llueve
- Septante, si aprendiste francés en Francia debes saber que ellos dicen soixante-dix, pero en Bélgica los francófonos dicen Septante = Setenta
- GSM = Teléfono móvil
Tal vez aprendiste a decir, tu m’en redonnes un peu ? Pues bien, hablando a lo belga sería algo como: Tu m’en redonnes une fois ? = ¿Puedes darme un poco más?
y qué tal cuando te dicen; est-ce que tu sais me donner le sel ? Cuando lo que aprendiste es; Est-ce que tu peux me donner le sel ? = ¿Puedes darme la sal?
Como en todos los idiomas siempre hay una tendencia a alterarlo y jugar con él, y conocer estos códigos nos ayudan cada día a sentirnos más en casa.
El estilo de vida en Bélgica
En Bélgica se come mucho y muy bien. Encontrará buenos chocolates, mejillones y patatas fritas, el plato nacional belga, y por supuesto su famosa variedad de cervezas. El folclore belga se ilustra con varias fiestas locales organizadas a lo largo del año con alegría y buen humor. Para los amantes de la música electrónica, Bélgica es el destino idóneo, ya que acoge cada año numerosos festivales, como “Tomorrowland” o “I Love Techno”. Además, la vida nocturna está en el centro del estilo de vida belga, con numerosos cines, salas de conciertos, restaurantes y otras actividades disponibles en todas las ciudades del País.
Bélgica es un país diverso en el que los extranjeros somos bien recibidos. El ritmo de vida ligeramente lento de Bélgica puede exasperar a algunos recién llegados, pero los residentes llegamos a apreciarlo mucho.
En general, los empleados de Bélgica trabajan ocho horas al día. Los horarios de trabajo son flexibles, lo que convierte a Bélgica en un país animado, tanto de día como de noche. Las tiendas y boutiques abren de 9 o 10 de la mañana hasta las 6 u 8 de la noche de lunes a sábado. Las grandes tiendas y los grandes almacenes suelen abrir hasta las 21 horas los fines de semana. Las tiendas suelen cerrar los domingos, lo que hace que el país sea deliciosamente tranquilo los fines de semana.
Si acabas de llegar al país debes saber que se necesita tiempo para descubrir sus encantos, y sí que los tiene; en este país es difícil sentirse extranjero, la multiculturalidad está presente en cada esquina, está lleno de hermosos parques, gente de todas partes del mundo, expresiones artísticas por doquier, el balance perfecto entre una ciudad cosmopolita y un pueblo, todo enmarcado en un relajado estilo de vida. Bienvenid@s.